lunes, 18 de julio de 2011

La mezcla de alcohol


Los jóvenes representan una franja muy elevada dentro de la escala de consumidores de alcohol.
En los últimos años la cifra fue creciendo y la edad de comienzo de los chicos que toman bebidas alcohólicas fue disminuyendo.
Parece que tomar grandes cantidades no les alcanza para generar los efectos buscados por esto no sólo ingieren en exceso sino que lo hacen variado y mezclando distintos tipos de bebidas.
Tomar mucho alcohol trae aparejados problemas en la salud que con el pasar del tiempo comienzan a notarse. Si además de esto la persona, en este caso los adolescentes, toman distintos tipos de tragos con alta graduación alcohólica los efectos se intensifican y se multiplican.
Este tipo de situación puede traducirse en efectos inmediatos como por ejemplo, desmayos y pérdida del conocimiento y convulsiones. Y otros diferidos a lo largo del tiempo como problemas en el hígado, el corazón y el sistema nervioso entre otros.


martes, 5 de julio de 2011

Adicción a la comida: Cuando comer es lo único que importa


Comer es uno de los placeres de la vida. Si se realiza una encuesta disfrutar de la comida se ubicará, sin duda, en los primeros lugares. El tema no recae en lo que se coma, sino en el porqué se come, en la cantidad y la frecuencia con que se lo hace.

Cuando el hábito de comer se transforma en una dependencia se puede considerar a la persona como adicta a la comida.

Muchas personas utilizan la comida como medio canalizador del miedo, la ansiedad y la inseguridad personal enter otros aspectos más recurrentes.Toman la comida como la manera de calmar el dolor, la soledad y las frustraciones, ya que encuentran el placer cuando la están ingiriendo.

Realmente se les hace imposible no tentarse o ir a la heladera en búsqueda de comida a altas horas de la noche. Incluso cuando ya no tienen hambre siguen comiendo. Es algo así como una falta de límites propios que les permitan disociar cuando tienen que comer y cuando no.

La obesidad es el problema más conocido y masivo pero detrás de ella aparecen un sin fin de efectos colaterales que perjudican la salud de la persona en todos los aspectos y ámbitos posibles.

Problemas cardíacos y respiratorios. Poca o escasa movilidad, asma, dolores estomacales y gástricos son algunos de los síntomas más comunes en relación al aspecto físico.

En cuanto a lo emocional. Las personas adictas a las comidas, suelen arrastrar conflictos y problemas sin resolver por años. Tienen un alto nivel de frustraciones, se auto boicotean constantemente y poseen un grado muy alto de inseguridad y temor.

Fuente: ALCO